Nilofar Bayat es la capitana de la selección afgana de Baloncesto en silla de ruedas. Ella y su marido han conseguido ser reconocidos como refugiados políticos y acaban de fichar por el Bidaideak BSR, tras huir de Afganistán.
Bayat, licenciada en Derecho y que trabajaba en Afganistán con la Cruz Roja, quiere también volver a jugar a baloncesto. "No va a ser fácil continuar con el baloncesto, pero no lo voy a dejar. Cuando estoy en la cancha, me olvido de lo que está pasando", ha dicho. (La Vanguardia, 23-8-2021).
La vida de Nilofar Bayat, de 28 años, siempre ha estado marcada por la violencia de los talibanes. Cuando tenía dos años, un misil colisionó contra su casa, mató a su hermano y lesionó su médula espinal. Era la primera incursión talibán en Afganistán. Sus compañeras de equipo tienen historias de vida similares. Resultaron heridas en la guerra o la falta de medicamentos les generó complicaciones. «Tengo mucho miedo y estoy preocupada por mi futuro», confesó antes de lograr la evacuación. (El Correo, 18-8-2021)
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(RTVE, 22 de agosto de 2021)
Foto de El Correo, 18-8-2021